Ciudad Juárez, Chihuahua. A tan solo un kilómetro de la frontera con Estados Unidos, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, reafirmó el compromiso de su gobierno de prohibir el maíz transgénico en el país. Durante la inauguración del Hospital Regional de Ciudad Juárez No. 2, Sheinbaum aseguró que en febrero próximo se “dará la vuelta” a la resolución del panel del T-MEC que cuestiona los decretos mexicanos sobre el cultivo y comercialización de maíz genéticamente modificado.
“Ayer salió una resolución del panel del maíz. (…) Con la ayuda de las y los senadores y diputados, vamos a darle la vuelta a esta resolución”, enfatizó la mandataria.
El fallo, emitido recientemente, abre la puerta para que Estados Unidos y Canadá impongan aranceles a México si no se revierte el decreto que restringe el maíz transgénico antes del 3 de febrero de 2025. Sin embargo, Sheinbaum dejó claro que su gobierno mantiene una postura firme en defensa del maíz nativo y la biodiversidad del país.
“El maíz es una planta maravillosa, surgida de la domesticación de los pueblos originarios de Mesoamérica. Estoy seguro de que no se puede sembrar maíz transgénico; Hay que proteger nuestra biodiversidad. Sin maíz, no hay país”, declaró la presidenta.
Además, la mandataria destacó la importancia cultural y económica del maíz en México, subrayando que su protección es un asunto de soberanía nacional. “Que se escuche lejos y fuerte: México es un país libre, independiente y soberano, una potencia cultural que se ha ganado el respeto del mundo entero”, concluyó.
El debate en torno al maíz transgénico sigue siendo uno de los puntos más sensibles en las relaciones comerciales entre México y sus socios del T-MEC, pero Sheinbaum dejó en claro que su gobierno no cederá en esta lucha.
