Estos Bills van muy en serio. Con una gran actuación a la ofensiva y defensiva, Buffalo derrotó como visitante a los Kansas City Chiefs, 38-20 se erigieron como el rival más fuerte de la Conferencia Americana.
En un partido que se retrasó una hora y 16 minutos por una tormenta eléctrica, la defensiva de los Bills le interceptó dos veces Patrick Mahomes, quien lució errático y presionado la mayor parte de encuentro.
Parecía que iba a ser un juego cerrado, pero cuando Kansas City ganaba 10-7, vinieron 17 puntos sin respuesta de los Bills para irse ganando al medio tiempo 24-13. Fue en ese momento cuando se retrasó el juego debido a las condiciones climatológicas y regresando a la cancha, Buffalo tomó una ventaja definitiva con otro touchdown.
La anotación fue cortesía de Micah Hyde, quien interceptó luego de que el balón en las manos a Tyreek Hill y se escapó 26 yardas hasta la zona de anotación.
Con el marcador 31-13, Kansas City anotó con Travis Kelce para ponerse 11 puntos abajo, pero una vez más, la ofensiva de los Bills pegó a la hora buena con una larga serie ofensiva que terminó con un pase de touchdown de Josh Allen a Emmanuel Sanders.
Vale decir que Allen había sido interceptado en esa ofensiva, pero un castigo de rudeza al pasador apagó el ímpetu de la defensiva de Kansas City, la cual, brilló por su ausencia en la primera mitad.
Allen terminó el partido con 316 yardas por pase y tres envíos de anotación.
