La reciente polémica surgida en redes sociales, donde la regidora de Morena en Saltillo, Alejandra Salazar, acusó a la Secretaría del Bienestar de utilizar recursos públicos para promocionar a la senadora Cecilia Guadiana, ha dejado en evidencia profundas divisiones y rivalidades políticas dentro del partido en Coahuila.
El conflicto se desató a raíz de un video publicado por Salazar, en el que señala la presunta presencia de camiones con la imagen de la senadora en instalaciones federales. No obstante, lejos de presentar pruebas contundentes, la regidora convirtió su denuncia en un ataque personal, lo que provocó la respuesta de Guadalupe Mandujano, madre de Cecilia Guadiana, quien salió en defensa de su hija con un comentario que desató aún más la controversia: “Cecy no tenía ninguna obligación de apoyarte, si no tenías para tu campaña, no hubieras entrado”.
Las declaraciones de Mandujano hacen referencia a un episodio previo a las elecciones en el que Salazar, según diversos testimonios, habría solicitado apoyo a la senadora. Al no recibirlo, la regidora habría iniciado una serie de ataques sistemáticos contra Guadiana, lo que ahora se traduce en acusaciones sin sustento.
El diputado morenista Antonio Attolini se sumó al enfrentamiento, intentando desviar la conversación con críticas hacia Mandujano y evitando abordar la falta de pruebas en la acusación original. Su comentario: “¿Todo se trata de dinero? ¿Así entienden la política?” refleja una estrategia de confrontación más que de aclaración de los hechos.
Por su parte, Mandujano no dudó en señalar la falta de resultados de Attolini en el Congreso de Coahuila, donde se desempeña como diputado plurinominal, además de cuestionar su cercanía con Carlos Robles, líder estatal del PRI, lo que plantea interrogantes sobre su lealtad dentro de Morena.
El episodio expone la lucha interna dentro de Morena en Coahuila, donde figuras como Alejandra Salazar y Antonio Attolini parecen priorizar disputas personales y protagonismos sobre la verdadera labor política. Mientras tanto, Cecilia Guadiana sigue enfocada en su trabajo legislativo y en la defensa de los intereses ciudadanos, dejando en claro que su compromiso está con la transformación del país y no con los juegos de poder de sus detractores.