La Cámara de Diputados aprobó por unanimidad en lo general una reforma que reduce la edad mínima para acceder a la pensión para adultos mayores, pasando de 68 a 65 años. Con esta medida, se busca beneficiario a un mayor número de personas con recursos económicos directos, fortaleciendo el sistema de apoyo social en el país.
El dictamen, respaldado por los 483 diputados presentes en el recinto legislativo de San Lázaro, también eleva a rango constitucional diversos programas sociales que fueron creados durante la Administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024). Entre estos programas destacan la pensión para personas con discapacidad permanente, el programa Sembrando Vida, y apoyos destinados a productores, pescadores y campesinos.
La reforma establece que el Estado mexicano deberá garantizar anualmente los recursos presupuestarios necesarios, conforme al principio de progresividad, para asegurar la transferencia de recursos directos a la población beneficiaria, reforzando el compromiso de proteger los derechos sociales adquiridos por los sectores más vulnerables.