El gigante farmacéutico estadounidense Merck informó ayer de que ha solicitado a las autoridades sanitarias de Estados Unidos la autorización de uso de emergencia de un medicamento de vía oral para tratar el COVID-19.
El comprimido se llama molnupiravir, “un medicamento antiviral oral en fase de investigación para el tratamiento del COVID-19 de leve a moderado en adultos que corren el riesgo de evolucionar a COVID-19 grave y/o de ser hospitalizados”, dijo la empresa en un comunicado.
La compañía dijo que estaba trabajando “con las agencias reguladoras de todo el mundo para presentar solicitudes de uso de emergencia o de autorización de comercialización en los próximos meses”.
“El extraordinario impacto de esta pandemia exige que nos movamos con una urgencia sin precedentes”, dijo Robert Davis, director ejecutivo y presidente de Merck, en declaraciones recogidas en el comunicado.
Wendy Holman, directora ejecutiva de Ridgeback Biotherapeutics, socio de Merck, calificó la solicitud de “paso fundamental para poner el molnupiravir a disposición de las personas que pueden beneficiarse de un medicamento antiviral oral que puede tomarse en casa poco después del diagnóstico de COVID-19”. Estados Unidos ya ha adquirido 1.7 millones de estos tratamientos de molnupiravir en caso de que se apruebe.